"...Sin embargo, antes de llegar al verso final ya había comprendido que no saldría jamás de ese cuarto, pues estaba previsto que la ciudad de los espejos ( o los espejismos) sería arrasada por el viento y desterrada de la memoria de los hombres en el instante en que Aureliano Babilonia acabara de descifrar los pergaminos, y que todo lo escrito en ellos era irrepetible desde siempre y para siempre, porque las estirpes condenadas a cien años de soledad no tenían una segunda oportunidad sobre la tierra " Cien años de soledad. Gabriel García Márquez. Gabo.
Maldita vaina, ¡maestro! Sí, todo lo escrito en sus obras es irrepetible desde siempre y para siempre. ¡Gracias! Nos vemos en Macondo
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