"Recién terminado, aún puedo sentir esos atardeceres malvas y el roce de las hojas de arce.
Nos pasamos la vida queriendo tener más....es fácil caer en esa trampa que la sociedad nos tiende, hasta que un día miramos alrededor y solo encontramos lo mismo que Fabiola; una casa maravillosa vacía y una relación rota, pero siempre hay un acontecimiento que nos sacude y nos hace replantearnos muchas cuestiones, nada pasa por casualidad, no solo hay lo que nuestros ojos pueden ver aunque escape de nuestra lógica y sobre todo nunca hay que perder la esperanza.
Siempre he dicho que Antonia J Corrales me encanta porque escribe directa al corazón y este libro no iba a ser diferente, quizás mi opinión no sea objetiva, es un libro de fácil lectura que no necesita tener mil páginas para hacerte pensar que ¡ojalá fuese cierto!"
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